Mi cala no os la puedo enseñar, es un lugar en el corazón, un lugar recogidito, un recuerdo, una baranda, mi abuela cortando flores, azulejos de colores y un camino para recorrer cantando, para pisar hojas de eucalipto, para arrancar su corteza desnudando su tronco de piel vieja y descubrir otro liso y suave de color indefinido y bajar con mi padre cantando a la huerta:
"Vamos a la huerta del tontoronjil
veremos al milano que ronda por allí"
y yo erre que erre con la saudade y el Alentejo portugués pero he de deciros que hay un antes y un después, aporque este es el último recuerdo que comparto con vosotros, al menos del país vecino, y si tengo que hablar de algo será de su estado actual, a partir del 2023 descubriendo cosas nuevas, que ya tenía ganas de dejar de beber del pozo y hacerlo de la cascada.Y aquí os dejo, con calas más reales que las mías, son las calas de Frida y Georgia O,keaffe
!Disfrutadlas
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